A La Vanguardia En El Uso De Refrigerantes Naturales
Hacia finales de siglo se prevé que la temperatura media global aumente entre 1,5 °C y 7 °C, lo que sin duda tendrá un efecto potencialmente catastrófico. En consecuencia, las decisiones que tomemos hoy resultarán cruciales para reducir dicho incremento; y esto incluye los tipos de refrigerantes empleados en nuestros sistemas de aire acondicionado y enfriamiento.
Los refrigerantes químicos sintéticos, de uso generalizado en todo el mundo, tienen un impacto mil veces mayor en el calentamiento global que el dióxido de carbono, comúnmente conocido como “gas de efecto invernadero”. Los estudios sugieren que dichos refrigerantes son los responsables de cerca del 8 % del total de las emisiones de efecto invernadero hasta la fecha. Además, a medida que se degradan, los hidrofluorocarburos — los refrigerantes sintéticos de mayor uso en la actualidad — también producen un tipo de ácido que, según expertos en la materia, es dañino para el medio ambiente, la vida marina y los seres humanos.
Güntner lleva ya muchos años fomentando el uso de refrigerantes naturales tales como el dióxido de carbono, el amoníaco, los hidrocarburos y el agua. Todos ellos tienen un impacto potencial mínimo o nulo en el calentamiento global dadas las cantidades que suelen emitir en sistemas cerrados. El dióxido de carbono en particular tiene beneficios adicionales, ya que no es tóxico y tampoco es inflamable. Esto lo convierte en un sustituto cada vez más popular para los refrigerantes sintéticos, por lo que su uso es de lo más variado: desde supermercados hasta plantas de refrigeración a gran escala.
Emblem Cranberry, una empresa ubicada en la región de Sainte-Eulalie de la provincia canadiense de Quebec, cuenta con uno de los sistemas de refrigeración con CO₂ transcrítico más grandes del mundo. La compañía es una importante procesadora y distribuidora de arándanos y otros frutos pequeños. La planta abrió sus puertas en 2016, y en noviembre de 2021 completó la última de sus tres etapas de expansión. Hoy en día cuenta con un túnel de enfriamiento rápido, dos áreas de producción para seleccionar, limpiar y empaquetar fruta, un enfriador, y dos áreas refrigeradas de carga y descarga. La planta tiene capacidad para procesar 25 millones de kilos de arándanos y 7,3 millones de kilos de otros frutos.
El sistema de enfriamiento de Emblem incluye un Enfriador de Gas Adiabático con hydroBLU™ de Güntner. «Se trata de un proyecto a largo plazo, así que Güntner era la opción ideal para nosotros. Su enfriador de gas cuenta con un serpentín de acero inoxidable y un bastidor sólido y resistente», comenta David Bastrash, director de Ingeniería y Producción en Zero-C, el proveedor del sistema.
«Los controles de Güntner hacen que sus soluciones adiabáticas sean idóneas para casos como este que implican el almacenamiento de fruta», agrega Jascha Heynck, vicepresidente de ventas, en Güntner Norteamérica. «El empleo de la tecnología hydroBLU™ en entornos con temperaturas elevadas ayuda a mejorar el rendimiento del sistema de enfriamiento de CO₂, lo que a su vez puede resultar en ahorros de hasta un 25 % en energía y un 50 % en el consumo de agua. El Enfriador de Gas V-shape VARIO ofrece un rendimiento superior gracias a su ahorro energético y a que necesita menos espacio para su instalación».
En comparación con aquellos equipos que emplean refrigerantes sintéticos, los sistemas de enfriamiento de CO₂ suelen tener una mayor capacidad de recuperación del calor residual, lo que los convierte en valiosas fuentes caloríficas. En Emblem, un sistema de glicol permite usar el calor producido por los bastidores de CO₂ para calentar las instalaciones y el agua empleada en la limpieza de la fruta; esto permite reducir costes y emisiones.
Emblem y su exitosa instalación de un sistema de enfriamiento de CO₂ marcan el camino para un futuro en el que los refrigerantes naturales serán la norma, algo que sin duda alguna será muy beneficioso para nuestro planeta. Güntner se enorgullece de liderar el camino.