Refrigeración Sin Agua Para Un Importante Complejo Turístico En Medio Oriente
A medida que las energías renovables reemplazan a los combustibles fósiles, los países que han dependido de los hidrocarburos han tenido que diversificar sus economías. Este es el caso de Arabia Saudita, el segundo productor de petróleo más importante en el mundo, y en donde los ingresos relacionados con la industria petrolera corresponden hasta al 40% de su PIB. Así, en 2016, el príncipe heredero Mohamed bin Salmán anunció el lanzamiento de Vision 2030, un programa de desarrollo que tiene por objeto impulsar los sectores públicos, tales como educación, infraestructura y turismo, así como estimular el comercio internacional independiente de la industria petrolera.
El programa incluye una serie de enormes proyectos de construcción, entre los que se encuentra el de El Mar Rojo, un megacomplejo turístico de lujo que actualmente se está edificando en un grupo de islas en la costa oeste del país. La primera etapa estará lista en 2024, y cuando la totalidad del proyecto se haya completado, habrá alrededor de 50 hoteles con 8,000 habitaciones, así como más de 1,000 propiedades residenciales. También se están construyendo un nuevo aeropuerto, una marina e instalaciones recreativas. En total, se calcula que a partir de 2030 el complejo atraerá a cerca de un millón de turistas al año, lo que aportará más de 6 mil millones de dólares anuales al PIB saudita. Es un proyecto en extremo ambicioso, pues la construcción se llevará a cabo en áreas que actualmente están deshabitadas.
El concepto de El Mar Rojo está cimentado en la sostenibilidad, la cual fue un factor preponderante en la planeación de toda la infraestructura. Toda la electricidad se generará mediante fuentes renovables —principalmente energía solar—, mientras que se minimizará el consumo de agua. Este es también el caso de los sistemas de enfriamiento tanto del complejo en la isla como en el pueblo costero que se está desarrollando en Arabia Saudita continental para ofrecer alojamiento al personal del centro turístico.
La empresa española Araner suministró la tecnología necesaria para enfrentar el desafío de un sistema de refrigeración sin agua. Es experta en el campo de la refrigeración urbana sostenible, confiable y rentable mediante el uso de turbocompresores. Los sistemas de refrigeración urbana suelen depender de torres de enfriamiento que emplean agua en grandes cantidades como refrigerante. Sin embargo, Araner desarrolló una tecnología especial para refrigeración urbana , la cual opera junto con los Enfriadores de Fluido V-shape VARIO de Güntner. Es una solución de gran capacidad y eficiencia que únicamente requiere refrigerante y no agua, para que el calor se libere en el aire. Y como no necesita una bomba de agua, también ahorra energía. Además, los Enfriadores de Fluido de Güntner cuentan con protección anticorrosiva especial para entornos marinos en tierra firme.
Los sistemas de enfriamiento del proyecto El Mar Rojo emplean un total de 132 Enfriadores de Fluido de Güntner, cada uno de los cuales cuenta con 18 ventiladores. “Este es el proyecto de refrigeración urbana más grande en el que hemos usado enfriamiento de fluido”, comenta de Ceballos. “Y hasta ahora, hemos conseguido la mejor eficiencia en una planta de este tipo”.
La capacidad de Güntner para suministrar tal cantidad de unidades en tan poco tiempo y con fechas de entrega estrictas fue esencial para el éxito del proyecto, agrega de Ceballos. “La razón más importante para colaborar con Güntner fue, naturalmente, la calidad y fiabilidad de sus productos”, afirma. “Pero también necesitábamos un proveedor con una capacidad de gran escala para cumplir con las expectativas de un proyecto de esta magnitud”.
Los Enfriadores de Fluido para el sistema de enfriamiento urbano del pueblo costero ya están operando, mientras que el equipo empleado en las islas estará listo a finales de 2023.